¿Qué ver en Williamsburg?
Prepárate para descubrir un ambiente completamente distinto al de Manhattan. Cuando llegas a Brooklyn, y en particular a Williamsburg, tienes la impresión de haber aterrizado en otra ciudad. Es un estilo de vida completamente distinto y te das cuenta enseguida al pasear por sus calles. Hay muchos cafés pequeños, tiendas independientes... es muy agradable pasear.
Descubrir la zona a pie
Distancia: 2,5km-
1Puente de Williamsburg
Un poco menos conocido que los demás, el puente de Williamsburg sigue siendo un puente interesante para cruzar. Es más cerrado, con barandillas a ambos lados, pero eso no impide ver el río a ambos lados. Si no quieres ir a Williamsburg en metro, seguro que cruzas este puente, ya sea a pie o en taxi. Es tan fotogénico como el puente de Brooklyn o el de Manhattan.
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2La Mona Lisa de Williamsburg
Esta pieza de arte callejero es una de las más conocidas del distrito. En realidad es una reproducción de una foto de Steven Paul, ganador de un concurso de fotografía. Está perfectamente alineada sobre un edificio en una intersección: a un lado se ve el One World Trade Centre y al otro el puente de Williamsburg.
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Graffiti “Brooklyn” en la tienda Sun and Air
Los artistas contribuyen al arte callejero de Williamsburg, pero también hay comerciantes y artesanos que aprovechan la oportunidad para promocionarse atrayendo a sus clientes con arte callejero, en lugar de con grandes vallas publicitarias. Este mural es un ejemplo perfecto. Sun and Air es un taller de reparación de bicicletas, pero se reconoce al instante gracias a la inscripción “Brooklyn” escrita en grandes letras rosas justo al lado de su entrada.
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Parque Domino
Abierto desde 2018, Domino Park se construyó en el emplazamiento de una antigua refinería de azúcar. Esta fábrica estuvo abierta durante casi 150 años y fue, en un momento dado, la mayor refinería de azúcar del mundo: ¡impresionante! Cerró en 2004 y estuvo algo descuidada durante varios años. Hoy es un animado parque con muchas cosas que hacer, como un parque infantil, una pista de voleibol y un campo de petanca.
Todavía se puede sentir el lado industrial de la antigua fábrica, con ciertos elementos reutilizados en el parque infantil o las antiguas instalaciones ahora convertidas en oficinas.
Además, las vistas sobre Manhattan son magníficas. -
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Cine Nitehawk
Si buscas algo fuera de lo común, aquí lo tienes. Se trata de un cine independiente que te ofrece la posibilidad de comer mientras ves la película. Funciona de la siguiente manera: antes de que empiece la película, te piden el plato que prefieres, te lo traen justo antes de que empiece y, al final de la película, te traen la cuenta para que la pagues al salir. Te lo pasarás en grande. Además, ofrecen bebidas y cócteles basados en las películas del día. Por supuesto, las películas serán en inglés, pero es una forma única de pasar una noche en Nueva York.
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“La guerra es un infierno” de Eduardo Kobra
Si sabes algo del artista, ya reconocerás que esta obra es de Eduardo Kobra, un artista brasileño que tiene numerosos murales a su nombre en Nueva York. Éste representa a Elvis Presley vestido de soldado. Forma parte de un proyecto que destaca a personajes públicos que han luchado por la paz: Presley, por ejemplo, lo hizo durante sus misiones militares durante la Guerra Fría.
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“Muhammed Ali” de Brolga
El título de esta obra se explica por sí solo: representa al boxeador Muhammed Ali. La pintó el artista australiano Brolga. Fue su primera obra, y ahora tiene varias en la ciudad. Simplemente quiso representar a este deportista porque admiraba sus logros, sus valores y lo que representa en el mundo del deporte.
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“Lucha por el arte callejero” de Kobra
He aquí otra de las obras más famosas, probablemente, de todo Nueva York. Una vez más, fue creada por el artista brasileño Kobra. Utilizó como referencia una foto de Andy Warhol y Jean-Michel Basquiat. La elección de estos artistas no se hizo al azar: durante un tiempo fueron incomprendidos y marginados por su estilo artístico. Es un poco como el arte callejero, que a veces puede ser mal aceptado o incomprendido.
Visita guiada por Williamsburg
Si le preocupa un poco no saber adónde ir, puede optar por una visita guiada. Le acompañarán en su recorrido por Williamsburg. Gracias a su guía, se asegurará de pasar por delante de todos los bonitos grafitis del distrito. Además, le contará la historia y el pasado de Williamsburg, que sigue siendo un barrio en plena transformación.
Comer
Modern Love Brooklyn
Si eres vegano, tenemos el sitio perfecto para ti. Y aunque no seas vegano, disfrutarás igual de estos deliciosos platos. Las recetas son únicas: risotto de calabaza, coliflor asada, macarrones con queso y anacardos en lugar de queso… Puede que los precios sean un poco altos, pero las raciones son realmente abundantes, así que creemos que está bastante justificado.
Dirección: 317 Union Ave.
Smorgasburg
Comer sobre la marcha es estupendo, pero hacerlo en el mayor mercado de alimentos de Estados Unidos es aún mejor. El mercado se encuentra ahora en varias ciudades estadounidenses, pero hay uno en Williamsburg en particular que es de visita obligada. Pruebe algunas de las especialidades de los distintos puestos, todos ellos pequeños negocios locales que quieren que descubra sus recetas. El ambiente es estupendo y la comida deliciosa. Es una actividad en sí misma que no puedes dejar de probar.
Pero, ¡cuidado! No está abierto todo el año: ve los sábados si estás en Nueva York entre abril y octubre.
Dirección: 90 Kent Ave.
Café Mogador
Este café también está en el East Village, ¡pero por suerte para nosotros también hay uno en Williamsburg! Ofrecen platos típicos marroquíes para el brunch. Probarás platos únicos que están sencillamente deliciosos. Es un negocio familiar, por lo que el ambiente es siempre agradable, tanto si vas aquí como si estás en el East Village.
Dirección: 133 Wythe Ave.
Juliette
Para un pequeño toque francés, Juliette tiene justo lo que necesitas. En un ambiente típicamente francés, venga a comer o a tomar el brunch aquí: croque monsieur, huevos revueltos, ensalada César, sopa de cebolla… El ambiente es realmente muy cálido, aunque a veces un poco ruidoso, pero eso forma parte del encanto del lugar.
Dirección: 135 N 5th St.
Depanneur
El nombre francés de esta cafetería/tienda de ultramarinos, popular por sus bocadillos caseros. Elaborados con productos frescos, estos bocadillos son deliciosos e incluso sustanciosos. Es un lugar popular entre los lugareños, a quienes les encanta su ambiente moderno.
Dirección: 242 Wythe Ave Corner
Tomar una copa
Westlight
Westlight es la azotea más alta de Brooklyn, y ofrece una magnífica vista tanto de Brooklyn como de Manhattan. La decoración es muy acorde con el ambiente del barrio: un poco industrial con un toque vintage. Además, es una de las únicas azoteas que admiten a menores de 21 años antes de las 21h. La relación calidad-precio es buena: un cóctel cuesta 18 $, lo que está dentro de la media neoyorquina.
Dirección: 111 N 12th St. 22ª planta
Hotel Delmano
Hay varios sitios buenos para tomarse un buen cóctel en Williamsburg, y éste es uno de ellos. En un ambiente discreto, tendrás una amplia selección de cócteles y licores de alta gama. El local es bastante íntimo: no es muy grande, pero se puede hablar tranquilamente sin tener que gritar para que te oigan. Un lugar estupendo para pasar la noche en Brooklyn.
Dirección: 82 Berry St.
Brooklyn Brewery
Si es amante de la cerveza, tome nota de esta dirección. Deguste cervezas elaboradas in situ que hoy son apreciadas en todo el mundo. Incluso puede hacer un recorrido por la cervecería antes de participar en una cata. Es un lugar de moda que refleja a la perfección el ambiente de Brooklyn y, más concretamente, de Williamburg.
Dirección: 79 N 11th St.
Ir de compras
Brooklyn Flea Market
Como ya hemos mencionado en varios artículos, éste es el mercadillo más grande de Brooklyn. Se puede encontrar en varios lugares, incluido Williamsburg (ten en cuenta que cierra en invierno). El ambiente es realmente representativo del barrio: encontrarás objetos y ropa vintage únicos. Además, hay una gran variedad de precios: es fácil encontrar un pequeño recuerdo por unos pocos dólares.
Williamsburg en pocas palabras
Como muchos barrios de Brooklyn, Williamsburg fue en su día una parte mala de Nueva York que no te recomendamos visitar. Drogas, delincuencia y bandas eran las palabras clave para describir este rincón de Brooklyn: era mejor mantenerse alejado.
Pero desde los años 90, las cosas han cambiado, ¡y por suerte para nosotros! Ahora es un barrio de moda con un ambiente muy agradable. Artistas, escritores y músicos han hecho suya la zona, que se ha convertido en un lugar muy artístico.
El arte callejero en particular ha despegado, pareciéndose cada vez más a Bushwick. De hecho, hay calles enteras coloreadas con graffitis y otras obras de arte.
No sólo llegan artistas para embellecer las paredes de Williamsburg, sino que los comerciantes también aprovechan para llamar la atención. En lugar de las tradicionales vallas publicitarias, el arte callejero se utiliza para promocionar grandes marcas.
La mejor manera de descubrir el distrito es deambular por sus calles, donde seguro que te topas con magníficos murales (sobre todo si sigues nuestro itinerario a continuación 😉 ).
Parque Domino
Este parque se encuentra en el emplazamiento de una antigua fábrica: una refinería de azúcar. Esta fábrica producía el 98% del azúcar que se consumía en EE.UU., así que puede imaginarse el tamaño del lugar. Cerró en 2004 y ahora ha dado paso a este famoso parque. Bueno, no del todo.
De hecho, todavía hay elementos que recuerdan al pasado del parque (sobre todo en la zona de juegos infantiles), e incluso se han instalado oficinas en las antiguas instalaciones de la fábrica. Hay un contraste real entre lo antiguo y lo nuevo.
También se ha convertido en un mirador ideal desde el que observar el skyline de Manhattan. Hay grandes extensiones de césped donde sentarse a orillas del East River. Al atardecer en verano: ¡no hay mejor vista!
→ Para saber más, ¡lee nuestro artículo sobre Domino Park!